Soledad ¿Tu mejor o peor compañera?

La soledad es un estado en cual muchos nos encontramos a lo largo de nuestra vida, ya sea por decisión propia o por las circunstancias que se nos presentan. Muchas veces decidimos quedarnos solos al abandonar una relación que ya no funcionaba, o simplemente nos retiramos un poco de nuestro entorno familiar y de amigos. Otras veces la soledad se nos impone casi como un castigo, y nos sentimos abandonados por nuestros seres queridos, amigos o por nuestra pareja. Pero algunas veces también nuestra soledad es un estado mental. No es lo mismo estar solo que sentirse solo. Me refiero a que podemos estar rodeados de amigos, de familia o con una pareja estable y aun así sentirnos completamente solos. O, por lo contrario, estar completamente solos y, aun así, no sentirnos solos.

En cualquiera de estos casos, lo que podemos analizar es que podríamos hacer con nuestra soledad. Que podemos hacer para que esa etapa en la que nos encontramos solos, nos sirva para beneficiarnos y no para perjudicarnos. Cabe la pregunta de si hay una diferencia entre cómo se siente la soledad impuesta, o la soledad elegida. Mi opinión es que si hay una diferencia en cómo se perciben la soledad impuesta y como se percibe la soledad elegida.

Todo lo que nosotros elegimos viene con un sentido de responsabilidad y aceptación, pues así es como nosotros lo queremos, es nuestra elección. Aunque muchas veces no nos guste lo que elegimos hacer en nuestra vida, igual sentimos que por último tenemos el poder de revertir esa decisión, la cual se mantendrá hasta que nosotros decidamos hacer un cambio. En este caso es cuando decidimos estar en soledad.

Por el contrario, cuando algo se nos impone, sentimos que no tenemos mucho control sobre la situación y es normal sentir un poco de desesperanza, ansiedad y frustración por creer que no tenemos mucho control ni poder sobre esta situación. Y esto es exactamente lo que pasa con la soledad cuando esta se nos impone. Muchas personas tenemos mucho temor a la soledad, algunas hasta pánico. Muchas personas tienen tanto temor a estar solos que siguen en una relación disfuncional con tal de no enfrentar la soledad.

La buena noticia aquí es que de cualquier manera podemos usar la soledad para beneficio propio y no necesariamente tiene que ser una etapa de desesperanza ni temor en nuestras vidas. Lo primero que debemos hacer es cambiar nuestra percepción de la soledad. Si percibes la soledad como una etapa de sufrimiento, eso debe cambiar. Tu actitud hacia estas etapas de soledad es sumamente importante. En lugar de percibirla como una etapa de no hacer nada, la puedes percibir como una etapa de oportunidades para hacer muchas cosas que no podrías hacer cuando estas en compañía de otras personas.

Hay miles de actividades que puedes hacer en soledad o contigo mismo, ya que la soledad es la etapa en la que te encuentras contigo mismo. Puedes intentar un nuevo pasatiempo, inscribirte en algún curso de algo que te interesa. Podrías practicar algún deporte que te guste. La lectura es algo que te puede ayudar muchísimo. Busca libros que te inspiren o que te ayuden a volar la imaginación. Hacer algún voluntariado en este tiempo también es una manera de sentirte bien y ayudar a otros. Puedes practicar la meditación o el yoga, estas actividades son sanadoras para tu espíritu y ayudan a mantener un cuerpo y mente sanos.

Descubre tus placeres de la vida y no te de miedo de hacerlos contigo mismo. Si quieres tomarte un café, no dudes un instante y ve a esa cafetería que te gusta, lleva tu libro contigo y disfruta del aroma de café y la lectura. Si hay una película en el cine que te interesa, no tienes que esperar a nadie, compra la entrada y disfrútala. Este tiempo de soledad es el mejor momento para explorar lo que te gusta y lo que no. No tienes que hacer nada por nadie, solo por ti y para ti.

Hay una gran frase de Federico García Lorca, " La soledad es la gran talladora del espíritu". Cuando te sientas o estés solo, no te sientas mal y recuerda que este tiempo es un regalo del universo para que lo disfrutes contigo mismo.